No soy

No soy la hija que mi madre espera, la traiciono cada día por haber decidido trabajar con mi padre, me cree egoista, interesada e indiferente. No se dá cuenta lo que he luchado por ella, y lo mucho que he llorado de impotencia.
Tampoco fuí la hija que mi padre esperaba, no terminé mis estudios, le deufradé, pero yo nunca quise ser lo que el quería, total, el es la peor persona para exigir algo, el peor ejemplo.
No soy la nieta que necesitan mis abuelos, los padres de mi padre, se pasan la vida reprochando poca atención, pero no me sale más, en cambio con la abuela Vicenta es distinto, quiero cuidarla y protegerla, pero a veces, no la escucho todo lo que ella requiere.Me agobia estar en casa, no lo puedo evitar.
No sé si seré la madrina que Miriam merece, tan inestable, con este corazón-montaña rusa, perdida,con unas ganas horribles de que me trague la tierra de vez en cuando y con la única certeza de que la quiero con locura.
A veces no soy la amiga que algunos precisan,me vuelvo cabezota e intolerante. Dependo de los que me rodean, y quizá a veces, y sin querer, de alguna manera termino "exigiendo" demasiado cariño.
No soy la psicóloga infantil que un día soñé ser.
Me quejo continuamente, aunque sé que no debo hacerlo, siempre hay gente peor, no sé si es inconformismo, o quizá sea egoismo.
No soy la mujer preciosa que a él le gustaría tener a su lado, ni la que llene sus vacios, ni con la que sueña.
No soy...
Se acerca mi 26 cumpleaños,casi 26 años de una Sandra equivocada,o no, y este año, no tengo ganas de celebrarlo,este año, no habra reunion de amigos en casa, ni tarta,ni celebración.
No soy quien soñé ser, y me traiciono cada día a mi misma. Hago cosas sabiendo que me haré daño, pero no sé cambiarlo.¿Quien soy?¿En que me he convertido? hoy no sé ser la muejer, que me daría la gana de ser.